"Otras" hormigas...

Deje que mi mente corriera sola por el teclado y me descubrí leyendo algunos fragmentos de libros un tanto... “desconocidos” para el grueso del pueblo, los cuales no son el tema directo, pero si gustan, pueden buscar esos temas en Internet.

Volviendo a lo que me interesa, deje que mi mente se relajara y abriera su propio closet, de donde salieron, no los esqueletos tradicionales, sino las armas, los documentos, los recuerdos y los conocimientos (Muy pequeños e inmaduros aun...) que he acumulado por algún tiempo con relación a un tema que en realidad, por sus propias razones y por las reacciones de las masas, produce una sensación de profunda soledad y miedo en mi pequeño corazón.

No voy a ahondar en ese tema especifico, sino que voy a llevarlo hacia un lado más simple, pero complejo, si se desea profundizarlo. La razón por la que la entrada en el blog citado al principio, esta idea y la imagen que esta mas arriba están relacionados, es una “conclusión” a la que dos payasos conocidos míos llegaron después de hablar por un tiempo sobre eso, y quien sabe que otros sórdidos temas.

Ellos postulan, como broma y locura común, que ellos son simplemente producto de mi imaginación. No son mas que fragmentos de mi propia persona que mi mente ha personificado a fin de evitar que salgan repentinamente de mi psiquis y puedan perjudicar a mas de uno. No puedo sentir que dentro de todo lo que ha sido este tiempo de reflexión y madurez de estas ideas que me atacan estos días, lo que estos dos ridículos dicen tiene mucho sentido.

Siempre he querido creer que detrás de todo sistema gubernamental, todo orden social, toda persona “normal” hay un grupo muy reducido de individuos que mueven piezas desconocidas, estando ellos mismo vendados y sedados, sin poder entender ni saber el porque están moviendo piezas que no saben que son, en la oscuridad. Siempre he querido pensar que detrás de estos individuos hay otro grupo aun más reducido que controla todo a la distancia, y llevan mucho tiempo manejando los destinos subliminales de cada individuo del mundo, asegurando así el secretismo y la perpetuación de este estado de somnolencia y letargo.

A lo que voy es que probablemente mi mente, en la constante alerta de saber que hay algo mas de lo que los demás creen que es más simple, ha desarrollado una válvula de escape para mis sentimientos e ideas mas profundas y las ha plasmado en imágenes físicas que, de un modo u otros, no son mas que un “Yo” diferente, guiado por otros intereses y otras cosas en el alma que no se ven ni se muestran en el diario vivir, pero que si son reales y a ratos se muestran en mediana gloria y majestad.

Por un lado, tenemos a alguien que lucha contra el mismo sistema del que es parte. Alguien que ha tomado una senda muy atípica en la tradición humana y académica (incluso dentro de su propia disciplina), con vistas a lugares más cercanos e inmediatos e intereses a rato vanos o profundos según los ojos de terceros, los cuales no juegan un papel significativo. Por el otro, tenemos a la parte más tímida y más introspectiva, con intereses de investigación y comprensión mas allá de la simple acción prematura y acelerada a roneo que actúa sin pensar, pero piensa sin actuar. Uno, en esencia y sustancia totalmente opuesto y diferente a mí, y otro , con cosas más cercanas y más fácilmente comprensibles y utilizables de manera inmediata.

Al final, sea real, irreal, tonto o serio lo que estos dos payasos querían decir, es agradable sentir que uno al final del día se tiene a sí mismo y bajo toda la cantidad de hormigas unicolor y grises que conforman la sociedad, siempre hay una hormiga con antenas rojas, buscando a alguien que le recuerde que las ideas, ya con simplemente ser nombradas, dan cabida a la posibilidad, sin necesidad de prueba, de que hay cosas que uno no sabe, porque gente muy antigua y cuerpos oscuros que han operado por mucho han aprendido no solo a mentir sobre su existencia, sino a integrarla a la sociedad, bajo la nariz de los que se hacen llamar los más poderosos.

Yo los condeno. El conocimiento es para todos. Sepan que hay aquí uno que sabe de Uds. Que sabe que Uds. estaban lamiendo sus heridas en la oscuridad. Que ve lo que Uds. han intentado hacer y fracasaron en ello. La Revolución termina aquí, infelices, y Uds. son los próximos Zares. Las hormigas serán rojas, negras o grises, pero siempre estarán las “Otras”. Seremos ganado, pero algunos tienen, tuvieron y tendrán siempre cuernos.

¡Sláinte!

P.D.: ¡Estamos de fiesta: Esta es la entrada numero 69! (69 = 23 x 3)