Eine kleine Hilfe, bitte?

Hace un tiempo, fui al supermercado a buscar a mi papá. Después de encontrarme con él, fuimos a la cafetería a comer y tomar algo. Entre las muchas cosas que uno ve cuando esta sentado tranquilamente tomándose un café, siempre es extraño darse cuenta de que es lo que a uno le llama la atención de sobremanera.

Unos metros mas allá, en una mesa de la misma cafetería, se encontraban dos mujeres, y por lo que pude alcanzar a percibir, eran madre e hija. La que más lógicamente era la hija estaba llorando. O mas bien, no llorando, pero si muy afectada, con los ojos rojos y claramente las orbitas de los párpados brillantes por las lagrimas que no habían alcanzado a brotar con libertad, dado que esta escena se situaba en un lugar publico / privado y muy transitado, por lo demás.

¿No les ha pasado, que van por la calle, en el metro, la micro, comprando en el supermercado, en el mall, y ven de repente a una persona que claramente, o había estado llorando, o bien, se veía presta a derramar grandes lagrimas en cuento estuviese sola en la seguridad de su hogar? ¿No les ha pasado que han sentido un enorme deseo, nacido de un escalofrió y una aceleración del corazón, de acercarse a esa persona, sentarse junto a ella, abrazarla y decirle, con todo el cariño que podamos, que TODO va a estar bien? A mi sí. Y es terrible no poder hacerlo debido a las inhibiciones a las que nos ha acostumbrado una sociedad cada vez mas plástica, mas vacía, mas individualista (En el mal sentido) y menos humana (Neo-liberalismo de mierd*... ¿Aunque tal vez no?).

Hobbes estaba equivocado: El hombre es bueno por naturaleza, hecho por Dios para amar, a Su semejanza y emanar una energía tan grande que nosotros mismos nunca llegaremos a comprender, empero no necesitamos entenderla.

¿No es ese el verdadero sentido de la sociedad, de la pluralidad, de la democracia, de la humanidad? Tener la capacidad de sentir tristeza cuando vemos a alguien triste, y sentir alegría cuando vemos a alguien alegre es una bendición, pues nos hace mejores. Eso, amigos miso, es conciencia social, creo yo.

La tan llamada “conciencia social” (Yo diría que estamos bien dopados...) que los demagogos, falsos guías e ignorantes nos explican día a día, no se ve en las protestas estudiantiles para que cambie una ley, a beneficio propio, o simplemente para echar en cara que uno ha “ayudado” a una causa que a uno no le afecta. No esta en las protestas “pacificas”, para criticar, y menos justificar una guerra en países lejanos. No esta en odiar a nuestros compatriotas por los errores HUMANOS que se cometieron hace mas de 30 años, con el pretexto de proteger al país (¡Maldito MIR y Patria y Libertad!). No esta en informarnos sobre un tema especifico y tener una posición beligerante, con el pretexto cobarde de libertad por medio de la muerte (Matanza, mas bien...) de algunos. No esta en simpatizar con órganos terroristas o fascistas que se escudan tras un grito de justicia y derechos que no es, ni exclamado por los realmente afectados, ni oído por los oídos correctos. No esta en desear la justicia encarnada en la venganza y destrucción de nuestros hermanos, para que gobiernen asesinos y corruptos. No se ve en los pasillos de las casas de gobierno. No se ve en el día a día. Se ve en nosotros mismos, segundo a segundo, latido a latido. Cada grano de arena, cada gota de lluvia, cada brisa invernal, cada sensación abrigadora. –PEACE.

¡Sláinte!